Ayer se cumplieron 17 años de la muerte de mi abuela materna. Tal vez 17 años sean muchos, demasiados, pero no los suficientes como para olvidarme de quien hasta el momento ha sido la persona mas importante en mi vida.
Mi "nana" como solía decirme me acompaño durante los primeros cinco años de mi vida y me enseño muchisimas cosas. Todos los días, despues de despertarme corría a su lado y pasaba ahi la mayor parte del día. Me daba un poco de dinero, lo justo para comprarle su cajetilla de cigarros y rentar una pelicula en el video club de enfrente. Habiamos recorrido ya la inmensa coleccion de peliculas de cantinflas, viruta y capulina y la mayoria de los hermanos almada. Pasabamos entonces algunos días mirando solo la televisión mientras llegaban los estrenos.
Era domingo, justo como ayer, me había mandado a casa de mis primos a jugar mucho mas temprano que de costumbre, fue entonces que en medio de mis juegos escuche el rumor de una troca, era uno de mis tios ladrilleros que al llegar empezo a subir una por una las sillas y las tazas, recordaba una escena similar cuando mi abuelo murío 5 meses antes. Subí a la troca confundido y fui a casa, mi nana me había mandado a casa de mis primos para no verla morir. Es la unica explicacion que le encuentro hoy, sabía que no me iba a separar de su lado y por eso prefirio que no estuviera en casa. No me pareció tan triste, sobre todo porque días despues yo seguía viendola donde siempre, en su cama, me sentaba junto a ella y hablabamos, ya no me daba dinero pero estaba conmigo, hasta que mi familia decidio que no era bueno que estuviera ahi solo. Solo yo podía verla, aun ahora siento que esta conmigo a cada instante, y no se, me he puesto melancolico al recordarla, tal vez porque estoy a punto de terminar mi carrera y se que ella estaria orgullosa de mi. Donde quiera que este, se que ella me cuida y se que no estoy solo.
lunes, 3 de septiembre de 2007
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